Consiste en la construcción de una figura mandálica, con medidas variables que se adapten a la pared asignada, cuyos ejes materiales estarán limitados por CD intervenidos algunos pintados con fibrones sintéticos,otros por fotografías.
Desde el punto de vista conceptual según JUNG la figura del mandala, que ya aparece en las pinturas rupestres y simbólicamente en casi todas las expresiones de las culturas del planeta, desde oriente(ej.:mandalas budistas) a occidente(ej.:rosetones cristianos) y de norte a sur del planeta(en la mayoría de las culturas ancestrales de los pueblos aborígenes), es el arquetipo que simboliza la búsqueda del sí mismo.
Para su concreción, se convocaron entonces, por distintos medios, a que quienes quisieran participar, alumnos, profesores, artistas , público en general aporten una fotografía, su selfie color en una determinada medida.
Los CD y las fotos componen entonces esta instalación, en un formato circular con las caracteristas de la construcción del mandala, en la que todo aquel que haya colaborado enviando su selfie se buscarán hasta encontrar su rostro, metafóricamente a a si mismo.
Para su concreción material se necesita una pared blanca sobre la que será necesario pegar todas las partes que constituyen la obra con cinta resistente de doble faz asegurando así la permanencia del total de la instalación durante el transcurso de la muestra.